jueves, abril 21, 2005

Enero de cualquier año entre el 2003 y el 2005

Cuando la persona camina por la Alameda Libertador Bernardo O”hhigins, siente agotamiento, calor, sueño y algo de impotencia al no poder avanzar. Momentos después el sol pasa por una rendija de dos centímetros ubicada en el techo del bus amarillo antiguo, antiguas por que pronto vendrán unos buses de otros colores más modernos. La luz del sol (luz aexerna tarataran, requiem for a dream) llega en plana cara de la persona y esto no le permite leer bien el libro de cuentos completos de Cortazar, edición clase media, Punto de Lectura.

A veces me conviene alejarme de la realidad poética o mágico-maravillosa y asumir la vida a través del filtro netamente estadístico, arrojando informaciones innecesarias pero entretenidas (un pueblo educado es un pueblo preparado).

martes, abril 19, 2005

Hablar por hablar

De pronto me dan ganas de hablar, pero ganas de hablar por hablar, como aquella vez que me subí al podio del Liceo y comencé a hablar por hablar frente a todo el colegio y logre hacerme escuchar por una persona que me caía mal.

Cuando hablo por hablar me siento importante, la gente me mira y parece sentir admiración hacia mi, los hombres me palmotean la espalda, las mujeres me coquetean y los niños se ríen de mis palabras.

Cuando hablo por hablar no importa lo que diga, ya que nadie escucha verdaderamente lo que digo, ese es un hecho que me favorece ya que nunca se realmente lo que estoy diciendo y a fin de cuentas no me importa mucho saberlo.

Gracias a hablar por hablar he conseguido una buena vida, una mujer amada, tres hermosos hijos, una linda casa en la punta mas alta de un cerro, una profesión exitosa; ¿que mas se podría pedir?, tengo todo lo que he deseado y eso me llena de dicha, aunque lamentablemente hay ocasiones en que me cuesta quedarme dormido y pienso que nadie nunca me ha conocido, ni me llegara a conocer.

¿Como hacer un original de imprenta para una empresa multinacional?

Siente su humanidad en una silla ubicada cercana al clásico ángulo que poseen las habitaciones (no importa el material de la habitación, pero si es importante que este le provoque sentimientos de pena, angustia y vació). Luego debe comenzar a pensar en su felicidad, en la de millones de personas, y las debe comparar con la marca gráfica de la empresa en cuestión. Cuando estén cayendo sus primeras lágrimas habrá comenzado el proceso de trabajo de forma óptima.

Opinion personal con todo respeto

Somos las nuevas condiciones, la generación que creció en medio de los avances tecnológicos e hizo una relectura de las viejas y respetables costumbres y sentimientos del conjuro de nuestra humanidad

Somos la extraña mezcla que sólo puede resultar de una vida llena de medios caminos, música con cojones, familia con valores, un poco de miedo, amores frustrados, customers, llanto, masturbación y mujeres de ojos color negro que bailan en medio de la noche alegrando la triste y podrida existencia de un sueño que no tiene pies, no tiene cabeza, no tiene brazos, ni nada que pueda parecer conveniente al conveniente ambiente humano.

Somos lo que arrojo el mar, lo que queda cuando termina la programación de TVN y aparece la imagen estática de una mujer desenfocada, pero bella, por que lo confuso a veces es bello, por que después de cierta cantidad de años, alcohol y cigarrillos lo único que puede salvar algunas situaciones es un mujer sentada que mira los ojos del gato de la casa, y pregunta cosas como por que razón no puede comer solo y por que tenemos que animar con efusivos y fraternales gritos para que el naranjo animal le dé con todo al alimento Cat Chow para gatos de mediana edad.
Somos la verdad que no alcanzamos a mirar, por que a veces nos queremos mucho, y hacemos canciones, películas, escribimos textos y nos tratamos de reír de todo lo que nos rodea y unas cosas mas, pero todos sabemos que llegar a casa y estar sólo es una buena razón para ponerse a llorar, sin una gota de altanería.

Que la política no nos importa es basura comunicacional, que somos imbéciles viendo televisión, consumiendo tecnología, publicidad y cuanta mierda ponen delante de nuestro ojos, sin detenerse un segundo a pensar que es el objetivo de tipos que quieren ganar plata a costa de la plenitud de tipos sin plata, pero con mucho potencial, es una creencia generalizada.

El ser humano no es perfecto, mas bien todo lo contrario, no nos pidan resultados que no podemos entregar, en una sociedad llena de contradicciones, donde los asesinos son el producto y nosotros los productores.

Rumbo a casa

Rumbo a casa, la micro avanza entre dos murallas de color verde, la derecha es del murallón externo del Regimiento 515 de Infantería del Ejército de Socorro Andino de Chile, y el de la izquierda es el de una remodelación de Avenida Los Polpaicos, que pronto será una carretera de alta velocidad, francamente preciosa.Rumbo a casa, me siento bien al mirar por las ventanas y pensar que mucha gente como yo esta volviendo a casa y añora hablar con alguien de sus proyectos futuros y recibir en respuesta un gesto de buena crianza como un palmetazo en la espalda en el caso de un hombre, o un beso apasionado en el caso de una mujer.Rumbo a casa, el día se comienza a acabar y en época de invierno a esa hora comienza a oscurecer. Además, comúnmente, se me produce un nudo en la garganta de sólo pensar que el tiempo no para y que la mujer sentada al frente tiene un rostro bello y una sonrisa triste.Rumbo a casa, se me olvidan algunas cosas, como la hora y el sueño, las instrucciones y mandatos rígidos que sólo sirven para confirmar que no estamos locos, que todo tiene mucho sentido, que no se vaya a salir de la fila por que usted sabe “el que fue a Melipilla , perdió su silla”.Rumbo a casa, pienso en mi familia, en la 357, y en la señorita Cristina, también en que todo esta muy cerrado en esta micro, que veinti ¿Cuántos?, veinticinco años, que la soledad desespera, que vamos llegando a Longitudinal con Hugo Bravo, esperando que pase algo, que la micro pare y el chofer se ponga a cantar, que las señoras de la primera fila saquen las empanadas y el vino tinto, que los celulares a coro entonen melodías que todos seguirán entusiastamente, que yo saque a bailar a la señorita Cristina que parece que ahora esta mas linda y esboza una sonrísa de alegría (si, de alegría, lo confirmo).